Buscar este blog

02 agosto 2022

arrabales - 1998


 el cielo frío y plomizo de un día invernal se descuelga cubriendo el arrabal con una lluvia monótona y constante qu empapa y envejece  casas, barracones, animales y personas. Se trata de los flecos más recientes de la gran ciudad qué, aún sin conformar, faltos de todo, absorben sin tregua a los recién llegados ansiosos de una vida mejor, mientras va degradándose irreversible y caóticamente la campiña natural circundante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario